Organismos canadienses sugirieron, recientemente, que para poder mantener una economía sólida, la provincia de Quebec necesitaría casi el doble de inmigrantes de los que actualmente recibe.
Asimismo, en los últimos tiempos, esta provincia, considerada la segunda más grande de Canadá, ha recibido a unos 50,000 inmigrantes por año.
Sin embargo, la cantidad admitida de recién llegados a Quebec ocupó el sexto lugar entre las provincias y territorios de Canadá. El año pasado, la provincia decidió reducir el número de inmigrantes que recibiría a un máximo de 41, 800 para 2019.
Según un análisis del Conference Board de Canada, la inmigración no podrá anular totalmente el impacto del envejecimiento de la población en la economía. Pero sí podría mitigar los efectos demográficos y económicos, garantizando sobre todo una mayor proporción de trabajadores por jubilados.